País Vasco, 1609. Los hombres de la región se han ido a la mar. Ana participa en una fiesta en el bosque con otras chicas de la aldea. El juez Rostegui, encomendado por el Rey para purificar la región, las arresta y acusa de brujería. Decide hacer lo necesario para que confiesen lo que saben sobre el akelarre, ceremonia mágica durante la cual supuestamente el Diablo inicia a sus servidoras y se aparea con ellas.
Este proyecto nace de un sentimiento de injusticia, para reivindicar a esas mujeres libres e independientes que el sistema represivo de la monarquía clerical condenó injustamente a la hoguera y al olvido
Dirigida por Pablo Agüero (A son of a man, Eva no duerme), co-escrita junto a Katell Guillou, con Amaia Aberasturi (Vitoria, 3 de marzo) y Alex Brendemühl (Petra, Madre) como protagonistas.